(23-mar-2008) El nuevo paso del Santo Entierro sólo hizo medio recorrido

Informa: Chema Cejudo

La hermandad del Santo Entierro de Mairena del Alcor estrenó su nuevo paso de sepulcro en el transcurso de su estación de penitencia ayer sábado. Bello trono para el desfile, a partir de ahora, de su Cristo yacente, realizado por fases en los prestigiosos talleres de Manuel Guzmán. La obra fue muy admirada por el numeroso público congregado a su salida, aunque tras desatarse la lluvia sólo pudo culminar la mitad de su recorrido.

El paso, uno de los tres que integran la comitiva, salió de la Capilla del Cristo de la Cárcel a las 18,30. En él, la urna sepulcro del Señor se exhibió flanqueada por cuatro ángeles ceriferiarios sosteniendo cada uno un pequeño farol como puntos de luz, elevados sobre penachos por parejas hasta sumar ocho. A ellos se añaden otros cuatro, uno por esquina, sujetando la urna. Esta imaginería la aporta al paso Ventura Gómez. Un trono que suma, además, elementos de orfebrería aportados por talleres Manuel Ríos, junto a otros que también maravillaron referidos a los misterios tallados de su canastilla, representando por zonas las escenas finales de la Pasión del Hijo de Dios. En el frontal el de la Piedad, en el trasero la Resurrección, y en los laterales el Descendimiento y el Traslado.

Otros detalles dignos de mención son sus nuevos faldones de terciopelo negro (color luctuoso de la hermandad), o el llamador que incorpora, regalo de su cuadrilla de costaleros hermanos, que bajo diseño de Manuel Martínez Guillén confeccionaron en los talleres orfebres de los hermanos Fernández. La hermandad escribe así, según su propia junta de gobierno, una página importante de su historia, más por el acto de amor hacia sus sagradas imágenes y el pueblo que las adora que por la suma de nuevo bien patrimonial.

Abrió la comitiva el paso de la cruz vacío (popularmente "pasito") exhibiendo el sudario de Cristo junto a dos escaleras apoyadas. Tras él, el Santo Sepulcro con el Cuerpo de Cristo en la Urna, cerrando comitiva la siempre elegante Virgen de la Soledad envuelta entre orquídeas y otras flores blancas, y asistida por los austeros sonidos de una capilla musical de la Sociedad Filarmónica de Pilas, cuyos miembros también acompañaron al Cristo yacente.

Estos hermanos de la Soledad, por último, trabajan desde hace años en la construcción de una casa hermandad (ahora no poseen) en calle Trianilla, habiendo conseguido recientemente dar un importante impulso a las obras. Es por ello, que tras culminar los trabajos de más envergadura, a falta ya de los detalles, este año han podido ya utilizar la futura sede para el arreglo de sus pasos en la zona destinada a almacén.