(16-Mayo-2005) Maria Serrano inicia su gira internacional con Flamencotango

Informa: Chema Cejudo

La bailaora sevillana María Serrano iniciará el próximo miércoles día 18 gira internacional con su espectáculo "Flamentango", el cuarto que monta con su propia compañía, que ha sido concebido y ensayado íntegramente en Mairena del Alcor, donde reside. En esta primera etapa de su periplo por el extranjero, María Serrano recalará en un buen número de escenarios de Austria y Alemania, entre los que destacan los de ciudades como Viena, Stuttgart, o Innsbruck.



El espectáculo de esta bailaora nacida en el Barrio de Nervión rinde homenaje al flamenco y el tango en clave de fusión, y a través de él comparte emociones mestizas con un grupo de bailarines (o bailores) que componen los españoles Francis Núñez y José Galán junto a los argentinos Romina Godoy y Milton Homann. Unidos dan vida al encuentro de una pareja argentina, Susana y Astor, con la Andalucía de sus antepasados, a la que emigran huyendo de las duras condiciones de vida de su país.
Este encuentro recorre el camino inverso al realizado tras la Guerra Civil española por la abuela de la protagonista, igualmente bailaora, que tuvo que abandonar España hacia el exilio político. Medio siglo después, los efectos del choque cultural de vuelta ponen en evidencia a los ojos de Susana las líneas paralelas que se pueden trazar entre el tango y el flamenco, sonidos que a juicio de bailaora "casan mucho mejor de lo que pudiera parecer a primera vista".

De ilustrar musicalmente la síntesis de ambos géneros de encarga un grupo de músicos hispano- argentinos: Inmaculada Rivero al cante, Juan Cantarote al cante y la percusión, la guitarra de Antonio Rey, José María Gago al piano, Alejandro Benítez al bajo, y Luis Caruana al bandoneón. Ellos desgranan soleares por bulerías, tientos, tarantos, alegrías, farrucas, o tangos flamencos y argentinos, en versiones clásicas como las de Carlos Gardel, o innovadoras al estilo Astor Piazzolla.

No será éste el primer encuentro de María con el público extranjero, ya que la avalan múltiples giras por Méjico, Japón, Austria, Alemania, Taiwán, Suiza, Polonia, Hungría, o Dinamarca. Su primera salida a Japón la realizó con tan sólo 18 años, y desde entonces ha repetido en innumerables ocasiones, bien protagonizando sus tres montajes previos, o participando en otras compañías de prestigio como las de Meme Menjívar, Carmen y Carmelilla Montoya, Javier Barón, o Antonio El Pipa.

Pero los inicios de María como bailaora se remontan mucho más atrás, impulsada por su madre con tan sólo siete años en su sevillano barrio natal de Nervión. De aquellos inicios recuerda su intento de abandono, al que hoy se alegra de no haber sucumbido asegurando que "la danza es mi vida". Trascendental en aquellos momentos fue el apoyo que recibió de su abuelo Román, un gitano sevillano con mucho arte que nunca abandonó el oficio de frutero, y que proyectó en ella todo su amor por el flamenco. De igual modo fue decisivo para su consolidación como bailaora su paso por los tablaos flamencos sevillanos de La Trocha (debutó allí como profesional con 12 años) y El Arenal, en los que compartió escenario con gente como María del Monte o Chiquetete.

Su debut con compañía propia lo hace en la Bienal de Flamenco de 2.000 con el éxito que le reporta su espectáculo "Ritmo Flamenco- Cubano" junto a su viejo amigo Manolo Marín; en 2.001 estrena "Entre flamencos", donde comparte baile en exclusiva con bailaores; en 2.002 hace su particular versión del mito de Carmen; y en 2.005 presenta "Flamentango", cuyo preestreno se produjo en el sevillano teatro Lope de Vega el pasado mes de marzo, en el seno de la Cumbre Mundial del Tango, un espectáculo que aspira a representar en Mairena, donde tan buena acogida asegura haber tenido y donde aspira a crear su escuela a partir de la academia de baile que ya tiene abierta.