(24-Sept-2004) La Consejera de Medio Ambiente inaugura la depuradora Viso-Mairena

Informa: Chema Cejudo

El ansiado deseo de un río Guadaíra descontaminado está ya al alcance de la mano, tras la inauguración de la estación depuradora de aguas residuales para El Viso y Mairena del Alcor (la penúltima de las necesarias para culminar el objetivo), que encabezó en la mañana de hoy la consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, acompañada por el Director General de Aguas de la Consejería, Juan Corominas, así como los regidores municipales y algunos concejales de la oposición de casi todas las localidades ribereñas: Alcalá de Guadaíra, Mairena, El Viso, Arahal, y Paradas. Es precisamente la planta de tratamiento de aguas residuales de esta última localidad la que resta por poner en funcionamiento para ver culminados los objetivos marcados al amparo del Programa Coordinado para la Recuperación y Mejora del Río Guadaíra, al que este departamento de la Junta en colaboración con los municipios afectados ha destinado un total de 45 millones de euros. La inauguración de esta última planta EDAR se prevé para la próxima primavera, según informó en el acto la propia consejera.

En el acto inaugural, que transcurrió entre las 10,30 y las 12,30 de la mañana aproximadamente, la titular de Medio Ambiente resaltó los beneficios de la obra para la comarca y Andalucía en general, dejando patente su preocupación por el arduo trabajo que supone a posteriori el mantenimiento de las aguas limpias. Alertaba así Fuensanta Coves de los peligros de que se produzcan vertidos incontrolados, que den al traste con el esfuerzo averiando de paso la depuradora. La consejera pidió la colaboración del sector empresarial tomando medidas de depuración en el seno de sus propias empresas, ya que según explicó “la administración por sí sola no puede garantizar la limpieza de las aguas”.

Con mayor nivel de optimismo se manifestaron los tres regidores municipales concernidos en mayor medida, presentes en el acto. Así, mientras que el regidor alcalareño, Antonio Gutiérrez Limones proclamaba su “satisfacción por el cumplimiento del reto de la puesta en marcha de todas las plantas”, el alcalde visueño, Manuel García Benítez se jactaba porque “finalmente se ha solucionado un problema endémico”. Por su parte, el primer edil mairenero, Antonio Casimiro Gavira, remarcó que “no sólo se ha cumplido uno de los objetivos más importantes” que se habían marcado los alcaldes de la ribera, sino que de paso con la nueva instalación “se mejorará la calidad de vida de los ciudadanos.

La nueva planta EDAR Viso-Mairena se ubica en término municipal mairenero, en plena vega, y a pocas decenas de metros de la cornisa de Los Alcores. Se ha levantado en algo más de dos años, y tiene capacidad para depurar las aguas residuales de 40.000 habitantes (aproximadamente 3.000 más de los que actualmente suman ambas poblaciones). Con un presupuesto de 6,5 millones de euros, de los que 3.200.000 se invirtieron en la extensa red de colectores y canalizaciones que la abastecen, la planta funcionará durante sus primeros seis meses en explotación por parte de la unión de empresas que la ha construido. Con posterioridad se licitará su concesión a una de las dos empresas de aguas y saneamientos que operan en la comarca: Ribera del Huesna (que presta el servicio en El Viso), o Emasesa (que hace lo propio en Mairena). Aunque fuentes municipales de ambos consistorios han manifestado que la concesión recaerá sobre aquella que ofrezca las mejores condiciones para su explotación, representantes de las constructoras se han atrevido a pronosticar que casi con toda probabilidad se hará con el servicio Ribera del Huesna, ya que la empresa de aguas de Sevilla no suele mostrar interés por plantas de esta envergadura.

Características técnicas.- La nueva depuradora responde a las características de las denominadas EDAR. De tratamiento físico- mecánico, somete los residuos líquidos del alcantarillado urbano a un proceso de purificación en cinco fases, que permiten su reversión a los cauces naturales con una calidad, que si bien no se recomienda para el consumo humano, sí permite la existencia de vida natural en los cauces y riberas. La primera de estas etapas somete los fluidos a un “desbaste de materiales”; a continuación se la hace circular por dos dispositivos: desarenador y desengrasador. En el siguiente paso, las aguas son expuestas a un tratamiento biológico de agua y óxido, para finalmente, pasarlas por un decantador que filtra sus últimas impurezas dejándola completamente clara.