(6-Oct-2002) El Núcleo Residencial Los Naranjos se convierte en una gran estafa inmobiliaria.





Informa: Diario de Sevilla

Varios meses llevan ya paradas y sin visos de reanudación las obras de las tres promociones del núcleo residencial "Los Naranjos", en construcción en un nuevo barrio próximo al cementerio municipal San José, en Mairena del Alcor. Se trata de un conjunto de viviendas, cuyas dos primeras fases de 56 y 76 casas ya están íntegramente vendidas y casi terminadas, en tanto una tercera fase pendiente de inicio, también había vendido algunas de sus casas. Las empresas involucradas son la constructora Hormihogar, la inmobiliaria Primerhogar, la empresa de moldes prefabricados GTM, y la de electricidad y fontanería Módulos Escacena.

Los trabajadores afectados por la situación son aproximadamente 60, a los que se les adeudan dos meses de salario. Hastiados ya acaban de abandonar el tajo sin que la empresa los haya despedido formalmente, ni presentado suspensión de pagos. Ellos sostienen que el caso es un ejemplo de estafa inmobiliaria en toda regla, posibilitada por el entramado de sociedades que maneja el gerente, cuyo nombre han verificado que no figura como socio en ninguna de ellas. Ahora lo tienen muy complicado para reclamar el pago de sus sueldos ante el fondo de garantía salarial, y se quejan de que "no haya una legislación clara que castigue este tipo de delitos, como ocurre en otros países de nuestro entorno".

Entre los operarios se encuentra el único concejal de IU-CA en el Ayuntamiento mairenero, José García Navarro, quien manifiesta que los más de 140 futuros propietarios también han perdido las cantidades que dieron como entrada, cifradas de promedio entre los 12.000 y los 18.000 euros. Los problemas comenzaron a sobrevenir a comienzos de verano, cuando la empresa constructora se veía incapaz de conseguir que las obras fueran certificadas por estar incompletas. El efecto dominó propició que las entidades financieras La Caixa y Caja San Fernando no concedieran los créditos para financiar, e inmediatamente después la constructora dejó de pagar a sus trabajadores.

La razón del éxito para la rápida venta de las casas se encuentra en su asequible precio: 54.091 euros, entre 12.000 y 18.000 euros más barato que otras promociones similares, cantidad que argumentan los trabajadores se corresponde exactamente con el importe de las entradas pagadas por los futuros inquilinos. La razón esgrimida por la publicidad de la promotora -que incluso insertó anuncios en revistas profesionales de arquitectura- radica en la técnica empleada para construir mediante prefabricados de hormigón hechos en la misma obra. El resultado de tan novedosa fórmula se traduciría en economía y rapidez en los trabajos.
Las casas constan de tres habitaciones, baño, salón comedor, cocina, cuarto de baño, y terrazas anterior y posterior. Los operarios acusan a las empresas de haber creado situaciones parecidas en Villanueva del Ariscal ("Las Villas") y en Las Cabezas ("Las Adelfas"). Además, investigan sobre otros posibles casos en provincias de Andalucía y Extremadura. Los trabajadores quieren elevar su grito de alerta "para evitar al menos que nuevos casos se vuelvan a producir, ya que el nuestro es irreversible".